Conoce a Diego León Cuervo

Por @FXavierVidela

En esta ocasión es el turno de dar a conocer en sociedad a otro de los tantos colombianos que se encuentran compitiendo en Europa, él es Diego León Cuervo Zambrano, un pedalista de 21 años que corre para el continental español Burgos – BH.

Según él mismo nos cuenta, “nací en Cali, donde me crié y viví hasta los 6 años y medio, cuando viaje con prácticamente toda mi familia a Madrid, en donde vivo desde hace 14 años”.

El joven afincado en Guadarrama (Madrid), una zona “perfecta para la práctica de ciclismo”, se define como un “escalador con una buena punta de velocidad”. Además, comenta que “por mis características, me adapto mejor a los puertos largos”.

En la familia Cuervo Zambrano desde siempre “se ha vivido el ambiente ciclista, pues mi papá Hugo León lo practicó hasta Amateur y lo dejó para estudiar Aviación. Él es un apasionado y poco a poco nos pegó a mi y a mis cuatro hermanos, dos de los cuales también practican ciclismo, Cristian (sub23) y Michel (juvenil), la pasión por este bello deporte”

Actualmente, su padre Hugo dedica su tiempo al negocio familiar, la empresa Mármoles y Granitos, la cual “fue nombre de un equipo Pre juvenil y Juvenil en Colombia  y otro en España, entre otros. Por el equipo pasaron Nairo Quintana, el campeón nacional de Colombia sub 23 Diego Ochoa, Carlos Verona (actualmente en el OPQS) y yo”

Recordando un poco sobre sus comienzos, menciona que arrancó a practicar ciclismo “hace 10 años, cuando tenía 11, en España. Siempre me había llamado la atención. Yo fui quien le animó a mi padre para que me apuntara a un club, y ese día mis dos hermanos más pequeños fueron con nosotros y también se apuntaron, por lo que ya llevamos 10 años los tres dando pedales”.

El admirador de Lance Armstrong y del “Gato” Félix Cárdenas, se considera “muy tranquilo, callado y tímido”, aunque se confiesa “muy sociable y gracioso una vez que tengo confianza”. Sobre su ídolo estadounidense comenta que “sigue siendo de admirar la capacidad de superación que tuvo para llegar a conseguir lo que se propuso. La sociedad no vio eso ni la mentalidad que tuvo para salir adelante, ellos solo vieron si se dopaba o no. Lance nos enseñó que jamás nos debemos dar por vencidos”.

Mientras que sobre su compatriota dice: “Hace muchos años tengo una gran amistad con él, desde cuando corría en Europa. Admiro su forma de ser, es súper cercano con los aficionados y es bonito ver que tu ídolo se comporte así. Desde pequeño me ha aconsejado tanto dentro como fuera de la bici. Para mi es un orgullo compartir y tener una gran amistad con él”.

Consultado sobre en qué momento decidió que quería dedicarse a vivir del ciclismo, “Pelitos”, apodado así  por sus familiares y allegados, dice: “siempre cuando te gusta tanto algo como a mi el ciclismo sueñas con ser profesional. Cuando realmente deseé ser ciclista profesional y vivir de ello fue en el 2011 cuando fui a competir a Colombia, donde corrí el Clásico RCN, entre otras. Allí vi el mundo profesional desde dentro y me gustó mucho”.

El agradecido colombiano no se olvida de quienes lo ayudaron a llegar a donde está: “Siempre he tenido el apoyo incondicional de toda mi familia, pero en especial mi papá es quien se levantaba súper temprano para ir a correr cuando las carreras eran lejos, cuadrándome la bicicleta, lo vive con una pasión increíble. Cuando no ha podido acompañarnos a las competencias siempre hemos sentido de corazón que está con nosotros. También agradezco a mi mamá, quien se ha aguantado los nervios cuando nos hemos caído o los madrugones. Mi novia Jhona forma parte de un gran apoyo, en estos casi 7 años juntos siempre ha estado apoyándome en lo que era mi pasión, mi sueño y  ahora mi profesión”.

El liviano escalador de 57 kilógramos y 170 centímetros llegó al prestigioso equipo amateur español Cafés Baqué de la mano de Félix Cárdenas: “Cuando era pequeño iba a verlo en la Vuelta a España y otras carreras y él militaba en Cafés Baqué. En su momento, el director del equipo me dijo “chaval cuando tengas más años vente con nosotros al equipo aficionado” y quién diría que años después aquel muchacho estaría allí”.

Recordemos que el Cafés Baqué es el equipo que más años lleva formando jóvenes promesas dentro del ciclismo español, por lo que “es todo un honor haber formado parte del equipo durante 3 años”. El cafetero agradece a María Baqué, la familia Baqué y a Rubén Gorospe por haber “confiado en mi durante ese tiempo”.

Haciendo un repaso por los directores que tuvo, comenta: “Ha sido un lujo poder aprender de grandes corredores que han sido mis directores, como Ruben Gorospe, Alberto Leanizbarrutia, Joseba Beloki, Marino Lejarreta y David Etxebarria”.

Respecto a lo deportivo, entre sus resultados destaca el 6° puesto en la General de la prestigiosa prueba amateur Vuelta al Bidasoa en 2013, además de haber sido campeón de Madrid en 4 oportunidades.

En 2014 le llegó la chance de fichar por el Burgos – BH, equipo dirigido por Diego Gallego junto al mánager Julio Andrés Izquierdo a quienes “agradezco por confiar en mí”.

A poco de llegar al continental español, el caleño cumplió su sueño de debutar en profesionales el pasado 10 de febrero, cuando participó del Challenge de Mallorca (Trofeo Ses Salines): “Fue una sensación muy bonita de felicidad. Pues por fin cumplía aquel sueño que desde niño tenía estar de algún día en profesionales, era la satisfacción de haber dado por fin ese pequeño paso y el verme con todos los ciclistas que hasta hace nada veía en la tele”.

Así hemos presentado a Diego León Cuervo Zambrano, un colombiano que, a diferencia de sus compatriotas que brillan en Europa, se formó ciclísticamente en España, pero que seguramente dará que hablar en el mundo de las bielas, un mundo cada vez más influenciado por los talentos latinoamericanos.

Franco Xavier Videla

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