Cavendish trata de ayudar a uno de los mejores gregarios del pelotón a conseguir equipo

Por @pmpalermo

Se acaba diciembre y, normalmente, quienes no tienen equipo para estas fechas pasarán en blanco la temporada entrante o incluso dirán adiós. Aún así, la esperanza es lo último que se pierde y, además, con la pandemia vigente los tiempos han cambiado y algunas escuadras aún harán movimientos.

Por eso Julien Vermote no pierde las esperanzas. El belga está en su plenitud y no se resigna a colgar la bici, porque encima es uno de los mejores obreros del lote. Uno de esos ciclistas que hacen de todo en las sombras, especialmente tirar del carro durante horas, antes que las cámaras de televisión entren a escena.

Vermote debutó en 2011 con QuickStep, estructura en la que pasó siete campañas y era muy apreciado. Él decidió irse y, luego de dos años en Dimension Data y otro en Cofidis, se encuentra en el limbo, o algo parecido. “No es agradable buscar equipo por estas fechas”, dijo a Sporza.

“Cuando en Cofidis me dijeron que no seguiría pensé que iba a tomar tiempo, pero no tanto. Tengo algunas conversaciones aunque sin propuestas concretas. Debo esperar”, siguió. “Tuve contactos con Wanty (NdR: Intermarché Wanty Gobert desde 2021 y en categoría World Tour) y Alpecin Fenix, no serían malos destinos para mí”, analizó.

Vermote, posiblemente con el mismo espíritu desinteresado que lo llevó a sacrificarse por otros, contó que un colega está en la misma situación y que si debían disputarse el hueco deseaba que fuera para el otro. “Sé que Alpecin también habla con Laurens de Vreese, si tienen un solo hueco deseo que lo fichen a él”, indicó.

Llegado a este punto, el gregario confesó que sigue en contacto con Mark Cavendish, con quien compartió en QuickStep y Dimension Data. “Está comprometido con mi búsqueda y me ayuda. Es un caballero”, aseveró, y enseguida desestimó la chance de regresar a la estructura de Patrick Lefevere. “No lo espero. Me alegra que a él lo hayan fichado, lo merecía, pero no tiene nada que ver conmigo”, continuó.

“Siempre estuve muy bien en QuickStep, aunque no es sencillo volver. Es un equipo muy cercano a mi corazón, pero creo que tienen la plantilla cerrada”, refirió. “Quizás no debí irme, fue mi decisión y debo lidiar con las consecuencias. No me arrepiento de nada, era mi casa y aprendí mucho”, añadió.

Con 31 años, Vermote no se pone fechas. Sigue entrenando para estar listo en caso de un llamado, algo que sabe complicado porque los gregarios no ganan ni tienen prensa. Y si sucede, entiende que su valor habrá bajado, con lo que el nuevo contrato sería a la baja. Ojalá 2021 lo vea con un dorsal colgado.

Pablo Martín Palermo

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