Conclusiones de la París Roubaix

Por @pmpalermo

Increíblemente, la temporada de Clásicas del Norte llega a su fin y la París Roubaix ya es historia, en una edición con muchos condimentos que, aunque fueron del agrado de algunos y para otros no tanto, redondearon un espectáculo único como sólo este evento puede regalar.

Niki Terpstra ya tiene su Monumento y con eso como eje, toca analizar la 112º edición del Infierno  del Norte donde ninguno de los favoritos impuso sus condiciones, dejando abierta la puerta para el poderoso rodador holandés de Omega.

*2014,el año de Terpstra: si bien pocos esperaban su triunfo, el gregario de Boonen no es tampoco un paracaidista que se alzó con tamaña carrera por accidente ya que no en vano ha sido el mejor del Omega durante 2014.

Es que ya levantó los brazos en Tour de Qatar, Dwars door Vlaanderen, fue 2º en E3 Harelbeke, 4º en los Tres Días de la Panne,  5º en Omloop Het Nieuwsblad y 6º en el Tour de Flandes, resultados que en perspectiva, bien le hubieran valido el mote de favorito.

En ese contexto entonces, es claro que se trata de la temporada más espectacular de su trayectoria y, como dijimos en alguna entrada previa, Lefevere debería cuidarlo más en vez de malgastar sus piernas en pruebas de menor nivel.

*Boonen, clave: ya sea que buscara sus opciones o que realmente se sacrificara por el equipo, los ataques del gigante de Mol fueron fundamentales para la victoria de Tersptra. Gracias a sus intentos, se seleccionó el grupo, sobre todo a partir del 16º sector de pavé.

Con Boonen escapado, Stybar y el vencedor pudieron correr a resguardo, dejando al resto hacer el gasto para llegar con energías al tramo decisivo, donde el holandés lanzó su ofensiva y aprovechó el desconcierto, haciendo buena la superioridad numérica de su equipo.

*Vanmarcke, el más fuerte: una vez más el de Belkin fue el más fuerte sobre los adoquines, en una constante a lo largo de la temporada de clásicas en las que ya clasificó 3º en De Ronde y Kuurne-Brussells-Kuurne 4º en Omloop Het Nieuwsblad,  Gent Wevelgem y hoy en Roubaix y 5º en E3 Harelbeke.

El ex Garmin se mostró siempre a la ofensiva en los momentos clave pero falló junto a sus compañeros en la estrategia, desaprovechando muchas situaciones con superioridad numérica que podrían haber resuelto las acciones a su favor.

Vanmarcke es un talento único para este tipo de competencias y tarde o temprano conseguirá un Monumento, pero por ahora debe conformarse con ser eterno abonado al top 5 aún siendo el más fuerte.

*¿Una edición sencilla?: cuando hablamos del Infierno del Norte nada es fácil, pero si se toma en cuenta el clima benévolo y el hecho de que terminaron 144 pedalistas, podría decirse que la de hoy fue una edición light, con permiso del viento.

Es que habitualmente el barro y la lluvia atormentan al pelotón en el Monumento galo, y el numeroso grupo de corredores que se presentó en Roubaix para el sprint sumado al que terminó la carrera, deja planteada la duda sobre la dificultad real de la prueba del presente curso.

*La mejor cara de Hushovd: la temporada de Clásicas y, sobre todo la Roubaix, mostraron la mejor versión del noruego en mucho tiempo, ya que tras comenzar su debacle por enfermedad en 2012, nunca volvió a ser el mismo.

El año pasado se hizo con algunas victorias de segundo nivel, pero en 2014 y sobre los adoquines dejó destellos de su poderío, en este caso, encabezado las acciones ofensivas para BMC y preparando el terreno para un desafortunado Van Avermaet.

El portentoso Thor alcanzó incluso a Boonen y compañía tras los ataques en Hornaing y rodó con ellos en cabeza durante un largo trecho hasta que los favoritos acabaron con la fuga; lo concreto es que dejó un buen sabor de boca y ojalá este sea el inicio de su recuperación.

*Wiggins, brillante: mucho se habló sobre las opciones del campeón del Tour de Francia 2012 en el Infierno del Norte, pero pocos tomaron en cuenta que el inglés corría su 7º Roubaix y que su talento sale de la media.

Wiggo acabó 9º el duro Monumento pero además se dejó ver en los momentos decisivos e incluso fue él quién unió el grupo perseguidor en el que viajaba Terpstra con el de Cancellara, permitiendo así un desenlace diferente e inesperado.

Es evidente que el de SKY depende mucho de su cabeza, que así como lo hundió en 2013, le permitió destacar  en su primer gran objetivo de 2014, hecho que invita a la ilusión de cara a lo que pueda hacer en las próximas citas, con el Tour en el horizonte.

*Bert De Backer: el belga del Giant fue la gran sorpresa entre los que se jugaron la carrera, rodado con los punteros al formar parte del corte propiciado por Boonen en Hornaing.

Con 30 años y varios de trayectoria dentro de la estructura, el 11º puesto obtenido es su mejor resultado pero además entregó gratas sensaciones, corriendo sin desentonar junto a las estrellas e incluso desligando a Degenkolb de cualquier pedido de colaboración por parte del resto.

*John Degenkolb: La Roubaix en sus piernas: justamente el alemán de Giant fue otro de los protagonistas en una competencia que le sienta perfecto debido a la ausencia de cotas, el punto débil para su pesada humanidad.

El veloz pedalista lleva un 2014 de ensueño con 5 dianas (Tour del Mediterráneo, París Niza) e incontables podios, pero lo mejor de todo ha sido su confirmación en el pavé que tanto ama y donde obtuvo la Gent Wevelgem y hoy, un espectacular 2º lugar en el Monumento francés, donde probó que puede ser la alternativa en los próximos años.

*Fabián Cancellara, de nuevo en el podio: no se puede ganar siempre pero el suizo sigue sumando y acumula 12 podios en los últimos 12 Monumentos en los que terminó. Sencillamente impresionante.

Spartacus adujo cansancio y falta de energías debido al cambio de bici y el fuerte viento, pero también pudo haber jugado con la desesperación del resto para no trabajar y finalmente se le escapó en el embalaje, táctica con la  que fue 2º en San Remo y ganador en De Ronde.

Poco puede criticarse al poderoso suizo, que además no tuvo un gran equipo alrededor, y así y todo se las ingenió para subir al podio una vez más…

*Sagan da la cara: le cuesta al eslovaco en los Monumentos y hoy no fue la excepción, pero en su defensa hay que destacar los ataques protagonizados que lo llevaron a ser cabeza de carrera.

El de Cannondale fue capturado a 15 kilómetros de la llegada y en el sprint clasificó 6º pese al derroche de energías producido en su aventura, desempeñando un papel importante en el evento.

Sagan, que acudía a seguir aprendiendo según anticipó en la previa, lo hizo bien y puede ser una alternativa de cara a las ediciones venideras, aunque en lo inmediato necesita recuperar las sensaciones de antaño y encaminar una temporada que, para él, es bastante pobre con apenas 4 triunfos.

Bien por Geraint Thomas, Yannick Martínez y Sebadtian Langeveld. En deuda: el bloque Movistar y Keukelerie y Boasson Hagen, los dos obsesionados con la Roubaix y hasta ahora incapaces de ratificar sus ansias por la carrera.

Desafortunados Phinney, Paolini y Kristoff.

Pablo Martín Palermo

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