Corredor de la semana

Por @pmpalermo

El 98° Giro de Italia ya es historia y será recordado como uno de los más nerviosos y emocionantes de todos los tiempos, motivo por el que la elección de nuestro corredor de la semana no presenta demasiadas dificultades y es Alberto Contador el beneficiario del galardón.

A veces, la grandeza de ciertos atletas hace que las cosas parezcan sencillas y, en el caso que nos compete mucho más, porque con siete grandes vueltas (y contando) en su palmarés, el madrileño es uno de los más importantes pedalistas de la historia y, sin dudas, el mejor de la última década en estas cuestiones.

Terminar una carrera de tres semanas es una empresa reservada para unos pocos, así que ser el primero y casi sin gregarios, es una auténtica hazaña que pinta a las claras el talento del atleta de Tinkoff, quien además se sobrepuso a una luxación de hombro y superó momentos críticos como el pinchazo previo al Mortirolo y la pájara en Finestre.

Quizás éste último incidente haya deslucido un poco su actuación, pero no hay que olvidar que nadie gana en este deporte por casualidad y que Contador dominó permanentemente las situaciones, no sólo con sus piernas sino con la cabeza, venciendo la batalla psicológica de tal modo que manipuló a sus contrincantes hasta la 19 fracción.

¿A qué nos referimos? agrandó la magnitud de su lesión confundiendo a sus oponentes, apeló a su sabiduría para atacar a Aru cuando lo vio débil, evitó que Kruijswijk y Landa lo agredieran en el tramo final del Mortirolo y se tomó revancha del indecoroso ataque sufrido tras la pinchadura con una ofensiva en Monte Ologno en el instante en el que el vasco padeció una avería, sin olvidar sus comentarios en pos de generar discordia entre los dos capos de Astana.

En lo numérico, aunque no logró un triunfo parcial, hay que resaltar que sumó 9 top 10 individuales y 4 podios, volando en la crono y exhibiéndose en Monte Ologno y Mortirolo con sendas “crono escaladas” que le sirvieron para “salvar las papas” en el primer caso y extender su ventaja en el segundo.

Además, portó la Maglia Rosa desde el final del quinto parcial, cediéndola sólo un día y por una caída en el arribo a Lido di Jesolo, para recuperarla con una exhibición en la monumental crono posterior, donde metió casi 3 minutos a Fabio Aru, remachando los clavos del cajón, si se nos permite la expresión.

Campeón en tres de las últimas cinco grandes en las que participó desde su regreso por la suspensión, y de siete de las últimas nueve, el “Pistolero” alcanzó la línea de algunos mitos del deporte pedal como Fausto Coppi y Miguel Indurain, todos con siete, y quedó a tiro de Jacques Anquetil (8), acercándose a Bernard Hinault (10) y Merckx (11).

Por todo esto, más que centrarnos en la semana, rendimos tributo al campeón de la primera gran vuelta de 2015, quien resignó los meses previos pensando en el doblete Giro-Tour y ya consiguió la mitad de sus objetivos.

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Pablo Martín Palermo

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