La prisión de Cofidis: Comida en los pasillos, basura apilada y cero contacto con el exterior – Ciclismo Internacional

La prisión de Cofidis: Comida en los pasillos, basura apilada y cero contacto con el exterior

Por Oscar Trujillo Marín

De manera inexplicable el equipo Cofidis es uno de los que aún permanece (contra su voluntad) recluido en un hotel de Abu Dhabi tras la cancelación el jueves del UAE Tour. Los otros dos son Gazprom y Groupama-FDJ.

Thierry Vittu, su presidente, (al igual que ya lo hizo Roberto Damiani su director en carrera, quien se encuentra detenido, en incierta cuarentena junto a sus corredores y demás personal del equipo), utilizó la página oficial de la escuadra francesa para elevar una razonable queja por tan absurda e incomprensible situación.

Al igual que la totalidad de personal extranjero desplazado para participar en la prueba ciclística de los Emiratos, la delegación del Cofidis dio negativo en las analíticas realizadas entre jueves y viernes pasado, (y luego en los contra análisis también) que buscaban el corona virus por la sospecha de dos italianos resfriados, que también resultaron negativos. Ante esta incertidumbre Vittu expresó:

“Esto realmente no es normal. Estamos en contra de nuestra voluntad, retenidos en un lugar que no hemos elegido y por un período de tiempo desconocido, indefinido. Es este último punto el más complicado de soportar, siempre esperamos que las cosas mejoren pronto y no pase nada …”, escribió el presidente realmente preocupado.

Incluso Damiani, desde el hotel, amenazó en pasadas horas con llevar a cabo una huelga de hambre si no les resolvían la situación lo más pronto posible en una carta que remitió al portal italiano Tutto Bici, el angustiado director escribió: “Les informo que si en las próximas horas no se resuelve la situación empezaré una huelga de hambre para defender los derechos de los ciclistas y del staff del que soy responsable”. Más claro no puede decirlo y se entiende el nivel de estrés y preocupación.

Sin poder salir de sus habitaciones y tratados como apestados por el personal del hotel que les dejan la comida en la puerta y no han hecho las habitaciones desde hace más de 5 días, habiendo tenido la basura sin recoger de los pasillos también por varios días ya, el grupo del equipo Cofidis vive ahora mismo una mezcla de pesadilla kafkiana mezclada con síndrome de “Gran Hermano” sin ninguna gracia. Reclusión que intentan paliar a punta buen humor desesperado en las redes sociales.

Los corredores han visto cortada la progresión de su linea de entrenamientos y competencia, corriendo el riesgo de perder su forma para las citas siguientes que tenían programadas. “Hago un llamado y sería bueno que los medios se hicieran cargo de nuestra situación, solo para agregar presión donde sea necesario”, añadió Vittu, ante tan delirante y surrealista situación.

También cuenta Thierry: “Llaman a la puerta, dejan un paquete con comida y salen corriendo. Así es como nuestra gente está recibiendo alimentos”, agregó indignado el directivo francés. En pocas palabras, como si estuvieran en un patíbulo o residencia de leprosos.

“Cuando sales al pasillo y ves a alguien del hotel y le llamas ellos huyen”, cuenta el director francés. “Eso me trae a la cabeza otra comparación, somos tratados como víctimas de la peste; nuestras habitaciones no se han limpiado desde que se armó el revuelo hace 5 días, tienes que ir al ascensor, y ahí dejan un carrito y cada uno toma las sábanas, jabones, toallas…”. Desde luego, inquietante e incomprensible el silencio y la falta de consideración y claridad por parte del gobierno de los Emiratos y la propia UCI, que de momento no ha dicho esta boca es mía, hasta ahora. Pocas ganas de regresar a Abu Dhabi le quedará al equipo, y a más de uno de los afectados.

Es bueno recordar que Gazprom y Groupama-FDJ están en la misma angustiosa e incierta situación, de hecho, Armaund Demare hoy escribió un Tweet entre sarcástico y desesperado donde se quejaba de lo mismo.

Joseph K en el “El proceso” de Kafka fue privado de su libertad una mañana sin haber cometido delito alguno, ni ser informado de la causa de su detención. Los días pasaban en plena incertidumbre y nadie le daba información ni se vislumbraba luz para solucionar su demencial y abusiva situación. Aislado y sin respuesta alguna de una maraña de burocracia, ineptitud y despropósitos por parte de sus captores Joseph K. consumía sus esperanzas.

Intenten encontrar una diferencia entre lo vivido por el protagonista de la novela de Kafka, y la actual retención del equipo francés enclaustrado en las habitaciones en un hotel de Abu Dhabi, después de haber dado negativo en los mismos tests con los que los demás fueron liberados para abandonar el país; y sin más información que el desdén, la dilación sin respuestas o el silencio del gobierno y la UCI.

Las autoridades del emirato (quienes después del contra análisis negativo hoy han requerido a algunas personas de los equipos ¡para una tercera prueba! con la natural negativa e indignación por parte de las tres formaciones) parecen obsesionadas con encontrar un positivo de COVID-19 a toda costa, para justificar su terrible torpeza, pésima gestión e ineptitud después de todo el innecesario revuelo, escándalo y alarma mundial que causaron.

https://twitter.com/i/status/1234353653596803075

Oscar Trujillo Marín

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