Rigoberto Urán premia al floricultor que le siguió el ritmo mientras estaba entrenando
Por Oscar Trujillo Marín
Rigoberto Urán es desde hace años una de las grandes figuras del ciclismo colombiano. Su entrega, versatilidad y regularidad están fuera de toda duda. Esta semana inmerso en su rutina de preparación fue noticia amable y de esas con alcance mundial.
Pero Rigo también es muy conocido por su faceta de humorista accidental, involuntario, quizás su cara de clown vocacional y maneras ya invitan al chiste; y también es conocido por su olfato para los negocios. A su edad y sin ser el que más salarios altos ha recibido, -comparado con otras vedettes mundiales- a pulso y a punta de más de 14 años en el ciclismo profesional ha logrado posicionar en su país una importante cadena de tiendas especializadas en todo lo que tiene que ver con ciclismo: desde ropa, accesorios y por supuesto bicicletas.
Su forma de hablar muy coloquial, muy de pueblo de esa región de Colombia, que mezcla modismos hilarantes, vulgarismos y cierta procacidad mordaz (no en plan obsceno sino como muletillas, como se habla en los barrios y zonas populares) con un ingenio instantáneo para la réplica repleta de humor negro y absurdo le han hecho famoso, incluso entre los que no siguen el ciclismo. Podrá gustar más o menos, pero lo que no se le puede negar es un enorme carisma y vitalidad a prueba de bombas.
Esta semana viralizó en todo el planeta que sigue este deporte, un vídeo donde se le veía entrenando un esfuerzo contrarreloj de cara a su entrenamiento para el Tour, su gran objetivo. Rodaba a unos 45 km por hora de manera sostenida; un esfuerzo normal quizás para un profesional como él, pero imposible de mantener para cualquier aficionado. De repente un señor de unos 55 años ataviado con su excesiva ropa de trabajo de agricultor y una mochila a la espalda, que rodaba en una vieja y pesada bicicleta, le dio cacería, se le pegó a rueda y de forma increíble rodó impasible con él por varios kilómetros.
Admirado por el gran nivel de una persona no propiamente joven, y más en tan desfavorables circunstancias, Urán le pidió a su acompañante que iba en el automóvil que lo grabara: así, sin traje, ni máquina especializada y menos profesional, el señor simplemente le seguía el ritmo sin mayor dificultad. Rigoberto se detuvo más adelante cuando acabó su serie y le dijo a su colaborador que los volviera a grabar para felicitar públicamente al campesino aficionado por tan buen nivel. El señor, le confesó a su vez su admiración y ahí quedó la cosa como una bonita anécdota que le dio la vuelta al mundo.
Urán, la astucia que tiene no es solo en materia ciclística, para llegar siempre entre los mejores incluso aunque no tenga las mismas fuerzas, o para meterse en las fugas buenas en las pruebas de un día, el nacido en Urrao, vio en esa inesperada anécdota que tuvo tanto alance planetario, una oportunidad de oro para hacer publicidad de su negocio, y de paso ejercer de filántropo, cosa que nadie lo obligaba a realizar, pero sucedió. De seguro el labriego-ciclista se hubiera conformado tan solo con el saludo y felicitación en público, una gorra, de pronto y un par de bidones de su ídolo.
El señor Iván (no se conoce su apellido) que trabaja en un cultivo de flores cerca de La Ceja, municipio antioqueño, fue invitado ayer a una de sus tiendas por el mismo Urán. Allí, y a manera de sorpresa, fue obsequiado con una equipación completa con ropa de su marca y una flamante y liviana bicicleta Cannondale de las que vende también el carismático corredor del EF Pro Cycling.
Es evidente que estas cosas ocurren muy poco en la vida, poder conocer a tus ídolos, poder pedalear un rato con ellos en serio, y luego un final que… ¡ni en sueños!
Suponemos que si don Iván hubiese tenido un nivel lamentable, muy malo, no habría impresionado a nadie. Le hubiera visto rebasarlo en la carretera como una exhalación, habría dicho: “eh, ave maría hombre, ahí pasó el Rigo” y no estaríamos hablando de esto. Por eso, querido lector y aficionado al ciclismo, don Ivan es su moral, su aliciente: si un campesino de 54 años en una vetusta y roñosa bicicleta pesada, sin ropa adecuada ni complementos pudo seguirle el ritmo a Urán… ¿Qué hace usted en su casa este fin de semana tirado en el sofá, revisando memes de forma compulsiva en Facebook o viendo televisión? La carretera le aguarda, sin excusas y sin pereza.
Puede que nunca se encuentre con Urán, ni con ningún famoso ciclista y nadie le regale nada, pero la salud que gana y el infinito placer que da pedalear por el campo no tendrá precio, ni se puede comprar en ninguna tienda por muy especializada que esta sea.
Oscar Trujillo Marín
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Son los detalles que enamora de Rigo como persona… un gesto cálido, que puede dar muchos beneficios comerciales… Gracias Rigo por ser siempre así…
Grande, Rigo, grande !!
Excelente detalle de Rigo mostrando su lado más humano y con ese extraordinario obsequio en estos momentos tan difíciles le hizo pasar unos de los mejores días de si vida a don Iván
Definitivamente Rigo es un ser humano diferente, es un bacán. Es el amigo que todos queremos tener.
Pero este regalo ne hace poner en consideración dos temas:
1. Cuántos ciclistas como este campesino (que tiene mucha clase) se han perdido, se pierden y se perderán por falta de oportunidades, por falta de politicas incorrectas de deporte en Colombia.
El tema de los uniformes y chaquetas cortavientos negros. Ya lo he expresado en otras oportunidades y medios. La verdad es que no me gustan negros y no porque me parezcan feos. Sino porque me parecen peligrosos. En carretera se deben usar trajes que sean distintivos, que los conductores de vehículos y motos puedan identificar fácilmente al ciclista. Yo salgo rn las mañanas muy temprano y al atardecer y veo esta gente con esos uniformes y me parece un riesgo, apenas se distinguen en la vía. No entiendo porque la gente los usa y porqué los hacen. Los ciclistas debieran ser mas precavidos, mas responsables con su salud. Deben también ayudar a los conductores de otros tipos de vehículos. Una cosa es que los equipos profesionales los usen y otra los que salimos sin ninguna protección, sin vias cerradas.
De acuerdo “pantaloneta negra” SI –con camiseta de vivos colores o por lo menos un solo color claro- para que los vehículos lo distingan de lejos
GO- GO te saliste con la tuya- los otros compañeros WT que harán para igualar “semejante regalazo que le diste a Ivancho”
Me ha gustado como es que ayudas en las labores de la casa – definitivamente hay que aprender a trapear el piso como lo hace Go-GO (telenatioquia)
Rigo tiene todas las cualidades para ser empresario, su Antioqueniedad para los negocios y las relaciones pûblicas son naturales y su corazon es tan grande como su tierra. Rigo, go, go Rigo.