Van Aert cambia de estrategia y triunfa: “No quería arriesgarme a otro sprint”

Por @amatiz12

Wout van Aert por fin logró ganar en este Tour de Francia tras ser 2º en 3 oportunidades seguidas. Esta vez optó por apostar al triunfo en solitario y no reducir todo a un simple sprint, y acompañado de un fenomenal destrozo por parte de su equipo, pudo festejar y encima vestido de amarillo.

“De hecho, estaba escrito que hoy sería un sprint. No pensé que fuera posible ganar solo hoy”, mencionó sorprendido el belga, seguramente por la poca dureza de las cotas categorizadas. “No quería arriesgarme a otro sprint”, expuso sobre el por qué igual intentó de esa manera.

Desde el bus tenían claro el punto de ataque y la motivación creció al ver que el plan funcionaba. “Estaba claro que queríamos mostrarnos en esa subida. Nathan (Van Hooydonck) aceleró el paso a pie de puerto, Tiesj (Benoot) se hizo cargo y luego escuché que había daños detrás de nosotros”.

Sin embargo, lo único que no se calculó era qué hacer después, pues todo dependía del daño hecho. Allí había que improvisar. “El plan era ir a tope hasta la cima y ver qué pasaba entonces. Vi que estaba solo y dudé un rato para esperar a Jonas (Vingegaard) y Yates”, se sinceró Wout, que visto desde otra perspectiva, priorizó la etapa y no una oportunidad para sacar tiempo a Tadej Pogacar, quien rodaba cortado.

De todos modos, Vingegaard no resistió y eso le dio vía libre para rematar. “Pero al llegar hasta el final, también dejo sentados a Jonas y los demás. Luego solo sufro 10 kilómetros por completo”, describió el corredor del Jumbo-Visma, que a la postre pudo celebrar uno de los triunfos más bonitos de su trayectoria. “Ganar en amarillo es especial. Este maillot te da alas”, cerró.

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