Wout Poels se cansó de trabajar para la gloria de otros
Por Oscar Trujillo Marín
A los 32 años y después de 6 temporadas de trabajar para Froome, Thomas e incluso Bernal el año anterior, Wout Poels se cansó de ser gregario.
Siendo uno de los corredores con más cualidades para las pruebas por etapas, para la escalada de largo aliento y los repechos duros tipo muro, del pelotón internacional, el holandés (quitando su excepcional triunfo de un monumento en la Lieja de 2016) acumula un palmarés más bien magro para su calidad, fondo y enormes condiciones. Lo cual es comprensible por el rol que ha llevado durante los mejores años de su trayectoria.
Sin duda, llegar al equipo más poderoso del mundo es el sueño de la mayoría de los ciclistas que aspiran a ser vueltómanos consagrados. Pero saber que siempre se tiene a los dos o tres (cuatro para este año) mejores especialistas en carreras de tres semanas del mundo por delante, es de entrada una invitación a aparcar las ambiciones personales de manera indefinida. A menos que seas un súper clase precoz y arrases en las pocas oportunidades desde la primera temporada.
El nuevo corredor del Bahrain-McLaren, en principio, sólo sabe que va a ir al Tour de Francia en su programación para grandes vueltas. Aunque en teoría, allí el líder será el otro flamante fichaje de la escuadra del emirato, Mikel Landa.
Sin embargo desde la formación le han prometido libertad para buscar sus opciones. En una entrevista para Cyclingnews Poels declaró “Realmente disfruté mi tiempo en Sky-Ineos, no me arrepiento. Pero ahora era el momento en que podía cambiar de equipo, así que tuve que hacerlo, estaba siempre en un papel fijo, limitado, especialmente para las grandes vueltas, estaba un poco atascado”.
Por estos días Wout corre su primera prueba del año en Valencia y no le va mal. Sus intereses en primavera se centrarán en el Tour de Emiratos Árabes, un par de vueltas de una semana por definir, el tríptico de las Ardenas y como preludio a la ronda francesa, el Dauphine Libere. Una buena oportunidad para que el neerlandés pueda exhibir el potencial que lo llevó a ser considerado uno de los mejores gregarios del mundo después de varias exhibiciones en la Grande Boucle al servicio del jefe de Filas de turno que llevara Brailsford.
Veremos como se comporta ahora, ya más maduro y con libertad. De momento ha comenzado brillando hoy en la cuarta etapa del la Vuelta a la Comunidad valenciana, en la dura pared de cinco kilómetros finales al 13 por ciento, donde solo fue superado por un intratable Tadej Pogacar.
Oscar Trujillo Marín
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mmm, no sé. Creo que a Poels le pasará lo mismo que a Porte, cuando salió del Sky al BMC a buscar gloria sin conseguirla. El Bahrein, de hecho, no creo que consiga mucho con el mismo Landa. Me parece que Theuns es en realidad el corredor que puede darle triunfos al equipo.